Es una tarde calurosa, todos entrenan o realizan
actividades para entretenerse, otros se encargan de mantener orden o vigilar,
mientras que Eva, en el cuarto de las mujeres cuenta con los dedos cuánto
tiempo hace que está en la Resistencia, y al darse cuenta de que lleva un mes
ahí se desespera. Jamás en su vida había faltado a clases, y ahora falta un mes
entero.
Rebeca, que está en la cama de al lado, la mira
confundida, la ve hablar sola, refregarse el cabello, despeinarse como si
estuviera loca y gritar. Hace gestos al verla así, y al preguntarle qué le
sucede, Eva no responde y sale corriendo a gran velocidad en busca de MADRE,
pensando.
No
puedo faltar a la fiesta de Michelle, ¡todos creerán que no fui porque no tengo
pareja! Y es verdad, pero me van a molestar de por vida, ¡no quiero que lo
hagan! Dios, ¡tengo que ir! ¡Además me perdí un mes de clases y ni siquiera sé por
dónde salí de Star para llegar acá! ¡Jamás falté a clases! ¡JAMÁS!
Al llegar a la oficina de MADRE entra sin golpear y la
ve leyendo unos papeles, anotando cosas, haciendo listas de cosas que les falta
conseguir. Ella levanta la vista para verla y le sonríe.
—¿Qué pasa Eva?
—¡Necesito regresar a mi casa ahora, si o si! ¡Es de
vida o muerte! —se apoya en el escritorio y mira con desesperación a MADRE.
—¿Pasó algo? ¿Algo con tu padre o tu madre?
—No, no, mi madre murió hace ocho años, y mi padre… él
nunca está… —baja la mirada con tristeza, luego la mira—. ¡No es eso! Es que…
va a pensar que es estúpido, pero mañana es la fiesta de Michelle y no puedo
faltar… si falto… si falto… —MADRE la interrumpe.
—Te van a molestar, ¿verdad? —sonríe—. Bien, comprendo
eso. Además ya perdiste un mes de clases, tu familia debe estar preocupada, ya
es hora de que regreses.
—No, a mi padre no le importo… siempre está ocupado…
MADRE la mira con tristeza, recuerda a sus propios
padres ignorándola por el trabajo, a Richard, su hermano y padre de Eva
haciendo lo mismo. Suspira y apoya su mano sobre la de Eva de manera dulce.
—Eva, que siempre esté ocupado no significa que no te
ame, porque uno nunca se da cuenta de lo que tiene hasta que está a punto de perderlo…
—sonríe, luego suspira—. Bueno Eva, voy a mandar a Joel y Levi para que junto a
vos investiguen la zona por donde saliste hasta encontrar la manera de meterte
de vuelta. Debe haber alguna entrada que no es visible comúnmente,
encuéntrenla, ¿sí?
—¿En serio? ¡Gracias MADRE!
Hmph,
ya no me dice señora Joan, ya pasó el tiempo… un mes desde que está acá, al
igual que Erik. Por lo menos pude estar un mes junto a mi ahijada antes de que
me vaya de este mundo, de que la muerte me toque, de que la oscuridad me invada… —piensa MADRE. Le duele el pecho y comienza a vomitar
sangre en el suelo—. C-cada vez estoy
peor… no me queda mucho, no creo poder llegar al próximo mes… ni siquiera sé si
llegaré a la semana…
Eva busca a Levi y Joel por toda la Resistencia para
que vayan a hablar con MADRE, uno le sonríe y la acompaña hablándole y riéndose,
el otro gruñe y la insulta, corriéndola con el brazo de manera despreciativa.
Levi la defiende, haciendo que Joel se enoje y lo insulte por meterse, se
insultan y amenazan con golpearse.
—Dios, ¡creí que ahora que son hombrecitos ya habían
empezado a llevarse bien! – suspira MADRE—. Bueno, van a ir junto con Eva a la
antigua base de OMEGA, donde Joel encontró a Eva. Busquen por donde salió y
vean si pueden entrar, analicen el lugar, porque esta noche Eva regresa a su
casa.
—¡Siiii! ¡Vamos! ¡Gracias Dios! ¡Te amo! —Joel salta
tirando besos al techo.
—¡Nooo! ¡¿Por qué?! ¿Realmente te vas Eva? —Levi la
mira con tristeza.
—Perdón Levi, pero tengo que regresar…
—Ohh, te voy a extrañar mucho.
—¡Pero voy a venir a visitarlos los fines de semana!
—Bueno, ya me escucharon, salen ya mismo para
investigar la zona, fíjense si es segura, luego regresen —MADRE los mira
cruzándose de brazos.
Dos horas después están cerca de la antigua base de
OMEGA, Eva se queja de estar cansada, no suele hacer ejercicio, todo lo relacionado
a deportes no es lo suyo, lo suyo es la matemática, la química y física. Joel
la insulta, no la soporta y el hecho de no verla nunca más hace que quiera
encontrar la entrada lo más pronto posible. Levi la ayuda a caminar, le ofrece
agua y le habla para distraerla, así no sentiría la caminata.
Eva mira la antigua base y se queda helada, es
inmensa, un enorme edificio donde entraría el cuádruple de la resistencia,
quizás más. Y cuando Levi le dice que la nueva es muchísimo más grande se queda
atónita. Comienzan a investigar por todo
el lado en donde Joel encontró Eva. No encuentran nada, el Edén está
completamente camuflado, así que sólo ven piedra y plantas, saben que es una
ilusión pero no lo diferencian de la realidad. Levi se burla de Joel, diciendo
que de seguro no recuerda dónde la encontró. Él se enoja y le grita,
insultándolo. Y así comienzan a pelear nuevamente, se golpean, se lanzan al
suelo y… la mitad de sus cuerpos desaparece tras unas plantas de aloe vera. Eva
los mira sorprendida, sólo ve sus piernas, unas encima de las otras, encontraron
la entrada.
Joel está sobre Levi, está a punto de golpearlo en el
rostro pero escucha sonidos extraños para él, sonidos de autos. Mira hacia
atrás junto con Levi, viendo la ciudad al final del callejón. Sonríen al darse
cuenta de que están dentro, se ponen de pie y caminan con cautela, asegurándose
de tener sus armas preparadas. Al llegar a la vereda miran a su alrededor, ven
los edificios, los autos y negocios, las personas caminar apuradas, todo increíblemente
hermoso. Sonríen con emoción en sus rostros, y más aún al ver una plaza. Joel
toma de la mano a Levi y corre hacia ahí, ven jugar a los nenes en los juegos y
sonríen, pero luego ven toda esa felicidad en la gente y se entristecen, notan
la gran diferencia con la tierra de los olvidados. La gente del Edén se ve
feliz, libre de problemas, de dolor. Sus vidas son fáciles, no sufren el
hambre, el frío, el calor. No sienten las continuas pérdidas de amigos en
batallas, o el ver cómo las madres lloran al perder a sus bebés por falta de
medicinas.
Es
injusto, es demasiado injusto… lo odio, odio a Bleirskin, odio esa maldita
familia, los odio, ¡los detesto!
Joel aprieta los puños con odio, nota que el lugar es
seguro, lo suficiente como para poder regresar a la Resistencia dando el aviso.
Sólo unas horas, unas horas más y se deshace de Eva, una molestia menos en su
vida. Lo que menos desea es una pendeja enamorada siguiéndolo.
Luego de regresar a la Resistencia y decirle a MADRE
todo lo que vieron, llenos de emoción, ella, Rebeca, Levi, Hayleen, Erik y
Cynthia despiden a Eva en la puerta. Joel sería quien la acompañe hasta su
hogar, cosa de asegurarse de su bienestar.
—A pesar de todo te voy a extrañar —Rebeca le sonríe,
cruzada de brazos. En verdad la va a extrañar, Eva le contaba muchas cosas del
Edén, y hasta le enseñaba a sumar y restar. Llegó a tomarle mucho cariño.
—¡Eva! ¡No quiero que te vayas! —Hayleén la abraza
llorando.
—Voy a regresar, voy a venir a verlos de vez en
cuando, no llores Hayleén, te prometo que te voy a traer cosas muy lindas —le
acaricia la cabeza abrazándola, luego mira a Levi, que la mira con mucha tristeza,
con sus ojos empañados. Se acerca a él y lo abraza con mucha fuerza, tratando
de no llorar. Levi es el mejor amigo que hizo en su vida, el primero real, el
que no desea perder jamás—. ¡Te voy a extrañar Levi! ¡De verdad te voy a
extrañar mucho!
—Yo también te voy a extrañar Eva, ¡la próxima trae tu
perfume así no gastás los míos! —se ríe abrazándola con fuerza, besándole la
cabeza.
—¡Te quiero tanto Levi! ¡Ojo con andar engañándome eh!
—se para de puntitas y le besa la mejilla.
—Yo también te quiero mucho, jamás te engañaría, sos
la única en mi vida… —sonríe acariciándole el rostro, tratando de memorizar
cada facción de su rostro para poder retratarla en una hoja. Eva mira a Cynthia
y le acaricia la panza, luego la abraza con cuidado, ambas se hicieron muy
amigas teniendo casi la misma edad.
—¡Espero que tengas un bebé hermosos y sano!
—¡Cuidate y regresá pronto! —le sonríe, Eva ve a MADRE
llorar mucho.
—Señora Joan, no llore, ¡me va a hacer llorar a mí! —Eva
la abraza y MADRE la abraza con fuerza, besándole el cabello.
—Te quiero mucho Eva, te quiero mucho, jamás lo
olvides… jamás, sos realmente importante para mí y en este mes que estuviste
conmigo me alegraste la vida… te quiero, y cuidate por favor, cuidate mucho. No
dejes que nada te suceda y buscá tu felicidad siempre…
—¡Yo también la quiero! ¡Por suerte tengo fotos de
ustedes! Cuando no se daban cuenta les saqué fotos con esto —señala una pulsera
plateada en su mano—. Igual voy a regresar, ¡no se van a deshacer de mi tan
fácilmente!
—Eva… —Erik la mira con tristeza.
—¡Zerito, te voy a extrañar! —lo abraza—. ¡No te
olvides todo lo que te enseñé! ¡Te quiero Zerito lindo! ¡Sos un hombre
increíble en todos los sentidos existentes! Voy a extrañar nuestras
conversaciones de logística.
—No quiero que te vayas —la abraza con mucha tristeza
en su rostro, Eva era la única que realmente lo entendía, la que le enseñaba
todo con paciencia, la que lo trataba como a un hombre y no como a un Hunter o
un niño—. ¿De verdad… tenés que irte?
—Sí, tengo que regresar… ¡pero ya voy a volver muy
pronto! ¡Los quiero a todos!
Eva se va junto a Joel, que camina sonriente al saber
que en unas horas se deshace de ella para siempre. MADRE la sigue con la mirada
hasta que la pierde en el horizonte, llorando.
Eva,
cuidate mucho… ojalá cuando regreses aún esté en ese mundo…
Cuando unas horas después Eva y Joel entran al Edén,
recorriendo las calles a pie, se cruzan a alguien que los sorprende, es Virgil
Jackman, el profesor de Eva. Él, al ver la mirada que Eva tiene posada en Joel,
se pone serio, celoso. Le habla a Eva, le dice lo preocupado que estaba, ella
le responde con desprecio, haciendo que Joel se ría diciéndole “¿cómo le vas a
hablar así a un tipo que te tiene ganas? Onda, ¿quién podría tenerte ganas a
vos?”. Virgil lo mira mal, no le agrada la manera en que la trata, Eva los
presenta formalmente y Joel le estrecha la mano con felicidad, sin problema alguno,
mientras que Virgil lo mira con odio. Pero no deseando estar junto a él, Eva
sigue su rumbo con Joel, dejando atrás a su profesor que los sigue con la
mirada, omitiendo la voz de una chica chillona a su lado que le habla en un
tono gangoso.
Cada paso que dan es un mundo nuevo para Joel, se pega
a las vidrieras mirando las cosas, se asusta cuando los autos pasan cerca de
él, enterneciendo a Eva. Mira todo con los ojos iluminados, llenándola de
preguntas, el por qué y el cómo de todo. Señala las cosas que no conoce con una
sonrisa, corriendo de un lado a otro, mirando todo como un niño que visita una
plaza por primea vez. Le agrada ver el pasto verde, los árboles, muchos
árboles. Ve flores en masetas o canteros, le llama la atención, sólo dos veces
en su vida vio flores, una fue cuando su padre, Christopher, el anterior PADRE
había regalado unas flores silvestres a MADRE como muestra de su afecto, y la
siguiente vez fue con las militares, vio un ramo de rosas en un jarrón. Le
gustan las flores, le parecen hermosas, pero más que todo le agrada el aroma
dulce que tienen.
Al llegar a la enorme mansión de los Lambert, Joel
queda boquiabierto, es mucho más grande que la Resistencia, más elegante y
bello, y encima viven pocas personas ahí, ella, su padre y los sirvientes. Eva
lo obliga a pasar, empujándolo para que entre. Los sirvientes enseguida la
rodean, todos estaban preocupados por ella, William había pensado en llamar a
la policía, pero Richard se había negado, diciendo que ella era “demasiado
rebelde y caprichosa” y que seguro era otro de sus numeritos.
Joel se ve obligado a quedarse a cenar, ya que una
mujer, esposa del mayordomo William, no le permite irse tan tarde. Al probar
esas comidas que él desconoce completamente, siente que conoce un nuevo mundo, y
más aún cuando prueba el postre, queda fascinado y enseguida se hace amigo de
los sirvientes, ganándose su afecto. Ellos notan la humildad de su persona, su
corazón solidario.
¿Por
qué? ¿Por qué debe ser tan injusto? ¿Por qué tenemos que sufrir todo, por qué
debemos morir y llorar mientras que esta gente es feliz y vive bien? ¿Por qué
tenemos que comer un guiso mientras que acá comen estas comidas raras? ¿Por qué
debemos ahorrar agua y apenas lavarnos, mientras que acá desperdician el agua
como si no valiera nada? ¿Por qué el mundo es tan injusto con nosotros? Justo…
justicia, ¿dónde estás? Esa mujer se tomó vacaciones muy largas, lleva siglos
escondida… ¿a qué le temés? ¿Por qué no regresás, Justicia?
Ya
que la Justicia es sólo un cuento, yo la voy a conseguir, voy a hacer mi propia
justicia. Soy el Cuervo, soy hijo de PADRE, fui criado por MADRE. Soy Joel
Santos y yo voy a traer justicia. Mi pueblo también merece vivir bien, merecen
reír sin miedo a morir…
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